La Asociación La Veguilla lleva 43 años trabajando para crear oportunidades y mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual. Desde sus inicios, nuestro objetivo ha sido favorecer su integración laboral y social, brindándoles herramientas para desarrollar su autonomía y participar activamente en la sociedad.
1956
Hace unos 47 años, un señor llamado José Alberto Torres, aglutino las necesidades y esperanzas de familias y personas como yo, Carlos Marín Santesmases. Juntos, fundamos estos cimientos fuertes y arraigados que nos han ayudado a crecer, el Colegio Virgen de Lourdes. Ahí crecí y aprendí grandes valores de la vida, sentía que mi familia y yo no estábamos solos, que nos abrazaba una familia más grande.
1982
Cuando llegó el momento de dar el siguiente paso en mi desarrollo, ese camino ya estaba preparado para mí. Gracias al esfuerzo de muchas personas que nos habían acompañado desde el colegio, nació lo que hoy es mi hogar: La Asociación la Veguilla.
1982
En esta finca descubrí el significado del trabajo y el esfuerzo, gracias al Centro Especial de Empleo, donde pude aplicar todo lo que había aprendido. En los invernaderos trabajábamos con dedicación, investigábamos sobre la producción de plantas ornamentales y las veíamos crecer, del mismo modo en que nosotros crecíamos con ellas. Con el tiempo, nuestros logros nos llevaron a expandirnos a nivel nacional, y me sentía que formaba parte de un gran proyecto, uno en el que mi esfuerzo tenía un propósito real.
1982
Pero La Veguilla no solo me ofreció un lugar donde trabajar, sino también un hogar donde vivir y compartir mi día a día con otros compañeros que, buscaban un espacio de pertenencia. La Residencia La Veguilla se convirtió en mi segunda familia, un lugar donde no solo encontré apoyo y compañía, sino también independencia y calidad de vida.
1990
Con el crecimiento de nuestra familia, también surgió la necesidad de ampliar nuestro hogar, dando lugar a la Residencia Nueva. Este espacio fue creado para acoger a más personas como yo, brindando un entorno de dignidad, apoyo y autonomía. Más que una residencia, es un hogar donde seguimos creciendo juntos, construyendo nuestra independencia y compartiendo nuestra historia.
2000
Gracias a la gran producción de plantas ornamentales y agrícolas, nuestro esfuerzo se vio recompensado con un crecimiento que nos llevó a dar un paso más: la creación de un segundo Centro Especial de Empleo en Aranjuez. Este nuevo espacio no solo amplió nuestras oportunidades laborales, sino que también nos permitió competir con otros invernaderos a nivel nacional, demostrando que el esfuerzo y la dedicación nos colocan a la altura del mercado.
Actualidad
Esta no es solo mi historia, es la historia de muchas personas que forman parte de La Asociación La Veguilla. Cada uno de nosotros ha encontrado un lugar donde crecer, aprender y ser parte de algo más grande. No solo hemos construido un hogar y un espacio de trabajo, sino también una comunidad basada en el respeto, el esfuerzo y la inclusión.
Actualidad
Y aunque cada historia es única, todas comparten el mismo hilo conductor: la oportunidad de avanzar, de ser escuchados y de demostrar que con apoyo y determinación, no hay barreras que no podamos superar.
Actualidad
La Asociación la Veguilla sigue siendo ese espacio donde el presente se construye con dedicación y el futuro se llena de posibilidades. Juntos, seguimos escribiendo esta historia.